La osteoartritis es la forma más común de artritis, afectando a millones de personas en todo el mundo. Si recientemente te han diagnosticado esta condición o sospechas que podrías tenerla, esta guía te ayudará a entender qué está sucediendo en tus articulaciones y cómo podría afectar tu vida diaria.
¿Qué es la Osteoartritis?
La osteoartritis (OA) es una condición dolorosa que involucra el deterioro de una articulación. A diferencia de otras formas de artritis que son principalmente inflamatorias, la osteoartritis comienza con la descomposición del cartílago, el tejido liso y protector que amortigua los extremos de los huesos donde se encuentran para formar las articulaciones.
Piensa en el cartílago como un amortiguador para tus articulaciones. Cuando caminas, corres o te mueves, el cartílago ayuda a distribuir la fuerza de manera uniforme y permite un movimiento casi sin fricción. En la osteoartritis, este cartílago se desgasta gradualmente con el tiempo.
A medida que la enfermedad progresa, afecta no solo al cartílago sino a toda la articulación, incluyendo:
- El hueso subyacente, que puede desarrollar crecimientos llamados espolones óseos (osteofitos)
- El revestimiento de la articulación, que puede inflamarse
- Los ligamentos y tendones alrededor de la articulación, que pueden debilitarse
- Los músculos que soportan la articulación, que pueden perder fuerza
Eventualmente, si el cartílago se desgasta por completo, el hueso roza directamente contra el hueso, causando dolor, rigidez y más daño.
¿Cuáles Son las Articulaciones Más Comúnmente Afectadas?
La osteoartritis puede afectar cualquier articulación de tu cuerpo, pero comúnmente ocurre en:
- Rodillas
- Caderas
- Manos, particularmente la base del pulgar
- Columna vertebral, tanto en el cuello (cervical) como en la parte baja de la espalda (lumbar)
- Pies, especialmente la articulación del dedo gordo
- Tobillos
Es posible tener osteoartritis en solo una articulación, pero muchas personas la experimentan en múltiples articulaciones, especialmente a medida que envejecen.
¿Qué Causa la Osteoartritis?
La osteoartritis se desarrolla cuando el proceso de descomposición y reparación natural de los tejidos articulares se desbalancea. Aunque el envejecimiento es un factor importante, la osteoartritis no es simplemente una parte inevitable del envejecimiento.
Varios factores pueden contribuir al desarrollo de la osteoartritis:
Factores de Riesgo Primarios
- Edad: El riesgo aumenta con la edad, y la mayoría de las personas muestra algunos signos de osteoartritis en al menos una articulación a los 70 años.
- Sexo: Las mujeres tienen más probabilidades de desarrollar osteoartritis que los hombres, especialmente después de los 50 años.
- Genética: Si tus padres o hermanos tienen osteoartritis, es más probable que también la desarrolles.
- Obesidad: El exceso de peso pone estrés adicional en las articulaciones que soportan peso, como las rodillas y las caderas. El tejido graso también produce proteínas que pueden causar inflamación dañina en las articulaciones.
Factores de Riesgo Secundarios
- Lesiones articulares: Los daños previos en las articulaciones debido a deportes, accidentes o lesiones ocupacionales aumentan el riesgo.
- Estrés repetitivo en las articulaciones: Trabajos o actividades que ejercen estrés repetitivo sobre ciertas articulaciones pueden llevar a la osteoartritis.
- Deformidades óseas: Las personas nacidas con articulaciones mal formadas o cartílago defectuoso enfrentan un mayor riesgo.
- Enfermedades metabólicas: Condiciones como la diabetes y la hemocromatosis (demasiado hierro en el cuerpo) pueden contribuir a la osteoartritis.
¿Cuáles Son los Síntomas de la Osteoartritis?
Los síntomas de la osteoartritis suelen desarrollarse lentamente y empeorar con el tiempo. Podrías experimentar:
- Dolor durante o después del movimiento de la articulación afectada
- Rigidez, especialmente después de períodos de inactividad como al despertarse por la mañana o estar sentado por mucho tiempo
- Sensibilidad cuando se aplica presión ligera sobre o cerca de la articulación
- Pérdida de flexibilidad y reducción del rango de movimiento
- Sensación de crujido al usar la articulación, a veces con sonidos de estallido o crepitación (crepitación)
- Espolones óseos que se sienten como bultos duros alrededor de la articulación afectada
- Hinchazón causada por la inflamación de los tejidos blandos alrededor de la articulación
Es importante notar que la severidad de los síntomas no siempre coincide con lo que se ve en las radiografías u otras imágenes. Algunas personas con daño significativo en las articulaciones en las radiografías tienen poco dolor, mientras que otras con radiografías normales pueden experimentar un dolor severo.
¿Cómo se Diferencia la Osteoartritis de Otros Tipos de Artritis?
La principal diferencia entre la osteoartritis y otras formas de artritis, como la artritis reumatoide, es la causa subyacente:
- Osteoartritis es principalmente un problema mecánico: el desgaste del cartílago articular.
- Artritis reumatoide es una condición autoinmune en la que el sistema inmunológico ataca por error el revestimiento de la articulación.
A diferencia de la artritis reumatoide, la osteoartritis:
- No suele estar asociada con hinchazón significativa, enrojecimiento o calor en las articulaciones
- No causa fiebre ni pérdida de peso inexplicada
- Usualmente afecta las articulaciones de forma asimétrica (aunque puede afectar ambos lados)
- No afecta típicamente a órganos más allá de las articulaciones
¿Cuándo Deberías Consultar a un Médico?
Si experimentas dolor o rigidez persistente en las articulaciones que no mejora con descanso o analgésicos de venta libre, es hora de consultar a un profesional de la salud. Un diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado pueden ayudar a manejar los síntomas y posiblemente desacelerar la progresión del daño articular.
Busca atención médica si notas:
- Dolor en las articulaciones que persiste durante más de unas pocas semanas
- Rigidez articular que no mejora con el movimiento
- Reducción del rango de movimiento en una articulación
- Incapacidad para realizar actividades cotidianas debido al dolor articular
Vivir con Osteoartritis
Aunque no existe una cura para la osteoartritis, la condición puede manejarse eficazmente con un tratamiento adecuado. Muchas personas con osteoartritis llevan una vida activa y plena al trabajar con profesionales de la salud para desarrollar un plan de manejo integral.
En futuros posts, exploraremos los métodos de diagnóstico, opciones de tratamiento, modificaciones en el estilo de vida y estrategias de afrontamiento para ayudarte a vivir bien con osteoartritis.
Recuerda, entender tu condición es el primer paso para tomar el control de tu salud y mejorar tu calidad de vida.